El planteo que hoy encara el Gobierno Nacional y también algunas provincias en su ámbito específico de jurisdicción, es una necesidad que la sociedad estaba pidiendo hace bastante tiempo y para resolver inconvenientes, en algunos casos graves de atención inmediata, y muchos de adecuación a la nueva realidad para dar un servicio de calidad, transparente, eficaz y eficiente con tiempos adecuados de resolución en causas judiciales, muchas de ellas con gran interés social.
*ffNEWs* conversó con el Dr. Carlos Dionisio Aguirre: Director del Colegio de Abogados de la Provincia de Córdoba.
Estamos ante un nuevo gran desafío: El de renovar Nuestra Justicia.
El planteo que hoy encara el Gobierno Nacional y también algunas provincias en su ámbito específico de jurisdicción, es una necesidad que la sociedad estaba pidiendo hace bastante tiempo y para resolver inconvenientes, en algunos casos graves de atención inmediata, y muchos de adecuación a la nueva realidad para dar un servicio de calidad, transparente, eficaz y eficiente con tiempos adecuados de resolución en causas judiciales, muchas de ellas con gran interés social.
Nuestra visión es que los Ministerios de Justicia, Consejos de la Magistratura y Poderes Judiciales, tanto Nacionales como Provinciales tienen una muy buena lectura en el diagnóstico previo y que han escuchado el reclamo social de un mejor servicio, asimismo y en determinados casos, también vemos con satisfacción algunas primeras acciones en ese sentido, como por ejemplo la determinación del Consejo de la Magistratura de instaurar controles de gestión y auditorías, que de seguro redundaran en un mayor seguimiento y un consiguiente mejor tratamiento, al menos de plazos procesales en los juzgados.
Sin embargo, no todo lo que se está haciendo es tan feliz, pero por lo pronto se ha comenzado a recorrer el camino de la sincerización.
LA JUSTICIA, en el marco de un sistema republicano de división de poderes debe sin dudas sumarse a las premisas de un Estado participativo y democrático, con una Justicia eficiente en el cumplimiento de sus funciones tanto administrativas como temporales. De una Justicia eficaz que pueda dar a cada uno lo suyo, haciendo realidad el precepto de justicia y utilizando las mejores herramientas, de una Justicia transparente donde todos los participantes involucrados tengan noticia de cada acto procesal y de la buena gestión en los juzgados, esto es en definitiva un interés colectivo donde se debe sumar al compromiso a todos los actores judiciales, en TODA LA SOCIEDAD, entre ellos El Gobierno, Poderes Judiciales, Colegios de Abogados y justiciables y plantear una estrategia nacional.
Hoy Argentina tiene un código de procedimientos por cada jurisdicción provincial y un cuerpo normativo procesal nacional, y esto sin lugar a dudas es otro tema a tener en cuenta.
Considerar experiencias internacionales, sería otra ayuda al momento de avanzar en las reformas y evitar errores ya cometidos en experiencias de otro países.
La complejidad y el avance tecnológico con sus múltiples aspectos y su cambio permanente y las modificaciones en la vida social que suponen, es otro y muy importante aspecto a considerar.
Es aquí, en este concepto donde creemos que reside el punto central o de enfoque de las buenas intenciones desplegadas al hacer la diagnosis de lo que se quiere mejorar. LA JUSTICIA le interesa a todos y todos pueden aportar para que su reforma sea una construcción que consiga los resultados que TODOS esperan.
Debemos abrir la cabeza para darnos cuenta que el mundo gira millones de veces por segundo y en cada vuelta propone un cambio y más complejidad y que si no tenemos esto en consideración, cualquier solución nacerá vieja, obsoleta y por lo tanto no cumplirá con los objetivos que se plantean y que no estará a la altura de los reclamos sociales.
Que vivimos en una sociedad de la información, del conocimiento, colectiva y absolutamente interrelacionada y conectada, y que por ello y cada vez más, las soluciones no son individuales sino colectivas, donde trabajar en equipo es el principio de soluciones complejas en ámbitos de múltiples actores, esto ya ha sido planteado en palabras por el actual Presidente de la Nación.
Así es y desde hace bastante tiempo se entiende esto en el mundo, donde la mayoría de la organizaciones internacionales han adoptado el concepto de " GOBERNANZA", que reemplaza a las decisiones tomadas desde la soledad de quienes se creen dueños o, desde el aislamiento de la soberbia o, de no saber compartir ideas, discusiones, decisiones y la ejecución de lo resuelto.
El concepto de Gobernanza hoy se impone en el mundo y Argentina va tomando ese camino, y ya se empieza a escuchar el concepto en muchos ámbitos de Nuestras discusiones y esto es una buena noticia.
“La Gobernanza”, tiene como palabras claves: la participación de todos los actores involucrados, la construcción de capacidades, la difusión, la transparencia y rendición de cuentas, el proceso de abajo hacia arriba en la propuesta, y la igualdad en la participación desde la generación de la idea hasta la ejecución de la mejor de ellas, esto supone una enorme democracia participativa de compromiso social.
El "multistakeholderism" (participación de múltiples actores involucrados), o modelo multistakeholder es lo que se impone en las organizaciones globales y que ha sido adoptado por muchas organizaciones nacionales con excelentes resultados, y que no es otra cosa que buscar la solución con la participación, en un pie de igualdad en las discusiones, de todos los sectores involucrados, lo que garantiza la legitimidad del resultado colectivo así obtenido, una garantía de satisfacción plena.
Por ello entonces invitamos a quienes asumieron la responsabilidad de la reforma judicial a adoptar el concepto de gobernanza, globalmente adoptado y vigente, y convocar para sumar y aportar su visión para la solución, a todos aquellos que somos parte de este entramado: por supuesto Gobiernos, Ministerios de Justicia, Poderes Judiciales, Colegios de Abogados, otros actores Judiciales (martilleros, policía, peritos, administrativos) y el JUSTICIABLE a quien en definitiva debemos dar la última satisfacción.
Hay actualmente en el mundo muchos ejemplos de participación multisectorial en las reformas judiciales que se han planteado y que deberíamos mirar y copiar en lo que sea adecuado y pueda adaptarse, entendiendo que no estamos solos, que muchos antes pasaron por esto y que podemos aprender de errores que ya cometieron otros y que también quisieron hacer reformas que solo contemplaban solución para una parte y no para el todo social.